EUROPA PRESS
1 marzo 2016
Filtros solares y parabenos se acumulan en la placenta de embarazadas
Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones
Científicas (CSIC) y del Hospital Sant Joan de Déu han demostrado que los filtros UV --protectores solares--
y los parabenos --conservantes bactericidas y
fungicidas que llevan muchos cosméticos-- se acumulan en la placenta de las
embarazadas y pueden ser transmitidos a los fetos.
El
trabajo, publicado en la revista 'Environment International', ha analizado un total de diez compuestos
--cinco parabenos y cinco filtros solares-- y ha
constado que más de cuatro tipos se encuentran en todas las placentas, y hasta
siete han sido detectados en una misma muestra.
Según
la investigadora del CSIC que ha dirigido el estudio, Silvia Díaz-Cruz, del
Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (Idaea-Csic), la presencia de estos compuestos es
"preocupante", puesto que durante el embarazo cualquier alteración
hormonal puede ser altamente nociva para la madre y para el feto.
Los
investigadores esperaban encontrar niveles muy bajos o indetectables de estos
elementos, pero "las concentraciones encontradas superan en algún caso los
11 nanogramos por gramo, más de 500 veces del valor
esperado de 0,02 nanogramos por gramo, y que
corresponde al límite de detección del método", ha detallado la
científica.
Sobre
si se trata de una cantidad excesiva, Díaz-Cruz ha puntualizado que "aún
faltan estudios para delimitar los niveles de riesgo".
Los
parabenos y filtros solares, que entran en el
organismo a través de los alimentos --agua y pescado--, por absorción dérmica y
por inhalación, han sido asociados con alergias, obesidad y baja calidad del
esperma, y la presencia de benzofenonas está
relacionada con la incidencia de endometriosis.
Dos
estudios recientes indican que un bajo peso en niñas y mayor peso y
circunferencia craneal en niños están "directamente relacionados" con
el contenido de benzofenonas en orina materna, si
bien son necesarios estudios longitudinales a largo plazo, con mayor número de
pacientes, para determinar si puede causar la aparición de patologías en la
financia y en la edad adulta, ha agregado la investigadora Lourdes Ibáñez.
Perturbadores hormonales
Estudios
en animales han demostrado que estos compuestos son perturbadores hormonales,
pueden afectar al sistema endocrino y causar infertilidad, además de que se ha
asociado su presencia con una baja tasa de espermatozoides y, en el caso de las
hembras, con desajustes en el ciclo menstrual.
Es
la primera vez que se estudia la presencia de algunos de estos compuestos en
placentas humanas, puesto que solo hay tres estudios previos como éste en todo
el mundo, según los autores, quienes también han destacado que "algunos de
los estudiados no se habían encontrado nunca antes".
El
Idaea-Csic demostró
recientemente que las delfines hembras embarazadas bioacumulan
y transmiten a sus fetos filtros solares, y los fetos presentaban niveles más
altos de filtros solares que sus madres.
El
compuesto que se ha encontrado más frecuentemente ha sido el BP4, detectado en
el 75% de las muestras, y del cual se pensaba que no se acumulaba en los
tejidos, y todos los parabenos se han encontrado en
casi el 100% de las placentas, siendo el metilparaben
el más utilizado en la industria.